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En términos de estilo, este nuevo vehículo se sitúa en las
categorías convencionales de los autos con tracción a las cuatro
ruedas, presumiendo altos niveles de desempeño, espacio y comodidad.
El C-Crosser es un vehículo altamente versátil debido a su sistema
de transmisión integral, que garantiza un comportamiento seguro en cualquier
clase de camino y tiempo, y la disposición de una cabina modular diseñada
para una amplia gama de necesidades. El C-Crosser es instantáneamente
reconocible como un Citroën. El posicionamiento dramático del logotipo
en cromo y el corte aerodinámico de los faros son características
estilísticas de las últimas creaciones de la marca.
El estilo del C-Crosser enfatiza su robustez con curvas defensas y salpicaderas,
su vitalidad con un perfil que fluye y la línea del techo inclinada,
y su elegancia con numerosos detalles en cromo. El vehículo responde
excepcionalmente en el camino. Siempre un punto fuerte de Citroën es la
suspensión McPherson adelante y ejes multibrazo atrás, que proporciona
un excelente balance entre confort y el manejo, esto es aumentado gracias a
unas llantas especiales Michelyn con rines de 18 pulgadas.
Si bien las líneas son calcadas a las del Peugeot 4007 y Mitsubishi
Outlander, el frontal es mucho más agraciado que en el 4007, con unas
formas más compactas y acordes al estilo del coche. Tiene unas medidas
de 4,64 m de largo, 1,81 m de ancho y 1,73 m alto (incluyendo las barras del
techo).
Inicialmente, estará disponible con un motor Diesel HDI de 2,2 l, una
variante del motor de 170 CV que llevan el Peugeot 407 y el Citroën C5.
Alcanza 156 CV de potencia máxima y 380 Nm de par máximo. Está
unido a un cambio manual de seis velocidades. Este motor puede funcionar con
una mezcla de hasta un 30 por ciento de biodiesel.
Con la transmisión integral, el conductor puede escoger tres ajustes
de la transmisión, dependiendo las condiciones del camino y el estilo
de manejo solamente seleccionando un control detrás de la palanca de
velocidades. El C-Crosse es fácil de configurar y reconfigurar. Los ocupantes
pueden hacer rápidamente cambios en el interior y sin esfuerzo. El vehículo
puede ser para siete pasajeros gracias a una tercera fila de dos asientos que
pueden ser completamente abatidos quedando un piso plano.
Además, en cuanto al equipamiento, el C-Crosser podrá incorporar
opcionalmente el pack audio de alta fidelidad con ocho altavoces, así
como con un sistema de navegación de última generación
o conexión 'bluetooth'.
Citroën presentó en 2001 el prototipo C-Crosser, que mostraba cómo
podría ser su todo terreno ligero en el futuro. Poco tiene que ver el
nuevo modelo con ese prototipo.