La especial de hoy terminó en la meta de Kayes con un triunfo de Carlos Sainz (Volkswagen), su tercera etapa en 2007. El madrileño alcanza las siete victorias en el Dakar, y se sitúa a sólo dos de las nueve de Josep Maria Serviá.

Segundo fue el portugués Sousa, compañero de Sainz, que entró a escasos cuatro minutos. Tercero Luc Alphand, a 4:52, resultado que recorta la distancia sobre Peterhansel, sexto, que está a seis minutos y medio.

Roma terminó la etapa quinto, a más de cuatro minutos de Sainz, y noveno en la general, un puesto por detrás de Sainz, a nueve horas y 17 minutos de Peterhansel.

Apenas resta quinientos kiómetros hasta el lago Rosa y el duelo entre los franceses se prevé apasionante. Peterhansel y Alphand caminan a sus anchas en la general, separados a más de una hora y media de otro piloto galo, Jean Schlesser. Será una nueva pelea entre el actual campeón Alphand y el hombre que más victorias acumula, Peterhansel.

Esteve, que ya se había impuesto en suelo marroquí tras ganar la quinta etapa de motos se hizo de la décimo segunda y fue seguido por el portugués Paulo Gonçalves y el polaco Jacek Czachor.

Pero, pese a su buen desempeño en el suelo del África negra, Esteve es sexto en la general.

Su compatriota Marc Coma perdió dos minutos con respecto al francés Cyril Despres, pero se mantiene con casi 53 minutos de margen en el liderato de motos.

Marc Coma fue decimosexto de la etapa a 17:20, mientras que Despres fue decimotercero a 15:25. La ventaja del español sobre el galo se reduce a 52:48 minutos, mientras que el francés David Casteu es tercero a más de una hora y diez minutos.

"Esta victoria de etapa es importante para mí porque venía al Dakar para ganarlo y cuando pierdes dos horas y tus ilusiones, es difícil seguir compitiendo", señaló Esteve al término de la jornada.

Por ello, el catalán estaba "muy satisfecho" de su comportamiento. "Voy a intentar continuar así y de disfrutar hasta la llegada a Dakar", confesó.