El piloto surafricano Giniel de Villiers ganó la séptima etapa del
Rally Lisboa-Dakar, disputada entre las localidades mauritanas de Zuerat y Atar
y cuya meta fue adelantada 134 kilómetros debido a una tormenta de arena,
y arrebató el liderato en coches a Carlos Sainz. Tampoco tuvieron suerte
los españoles en motos, ya que Marc Coma, que sigue líder, e Isidre
Esteve perdieron tiempo y Jordi Viladoms se retiró tras sufrir un accidente.
Nada parece definitivo, en cualquier caso, porque las distancias en la general
no son definitivas, ni mucho menos, ya que la carrera acaba de atravesar su
ecuador y lo que queda por delante es más complicado.
De Villiers se impuso en el tramo cronometrado, por delante del francés
Stéphane Peterhansel (Mitsubishi) y de Sainz, que perdió 4:50
en la meta.
La ventaja en la general de Sainz era hasta el momento de 3:11, por lo que
el sudafricano, compañero de equipo del madrileño, es el nuevo
líder.
Sainz se mostró contento pese a perder el liderato porque, afirmó,
tuvo muchos problemas y el tiempo cedido en la meta no fue muy importante.
"Hemos tenido que parar tres veces y eso nos ha hecho perder unos 15 minutos.
Pese a todo sólo he perdido cinco en la meta. Creo que De Villiers ha
tenido hoy suerte, porque se había perdido y nos ha visto a nosotros",
dijo el español.
"Pero de lo que estoy más contento es de que estoy bien en la general
pese a que nos ha tocado abrir ruta un montón de días. Creo que
el balance es mejor que el del año pasado", indicó.
En motos, el francés Cyril Despres (KTM), vencedor en la edición
de 2005, recuperó el crédito y se apuntó su primer triunfo
parcial con una ventaja de 2:43 sobre el noruego Pal-Anders Ullevalseter y de
4:38 sobre su compatriota David Casteu. El mejor entre los españoles
fue esta vez Isidre Esteve, que finalizó en quinta posición, a
11:02 de Despres, mientras que Marc Coma fue sexto, a 12:22.
El piloto español Marc Coma (KTM) se mostró satisfecho por mantener
el liderato en la categoría de motos del Rally Lisboa-Dakar tras una
etapa "superdura", pero lamentó la pérdida para el resto
de 'raid' de su compañero Jordi Viladoms, que se fracturó un brazo,
un día después de conquistar su primera victoria.
"Era un etapa superdura con mucha navegación y unas condiciones
climatológicas muy difíciles con el viento y la arena, que dejaban
la visibilidad muy reducida", indicó.
El catalán relató una etapa en la que hubo "absolutamente
de todo". "Había piedras, pistas de arena, duna. Era muy completa,
y lo importante en este caso era saber adaptarse", subrayó.