Los participantes se encontraron en esta segunda etapa con un total de 507 km
y 67 km de especiales. El decorado sería muy distinto al de la etapa de
ayer, enfrentándose a la montaña portuguesa en un trazado más
bien típico del WRC.
Los pilotos de rally aprovecharon la oportunidad que les brinda esta etapa
para destacar, sobre todo Carlos Sainz y Nani Roma, que resolvieron la etapa
sin dificultades. Y es que los vehículos Volkswagen y Mitsubishi han
acaparado los puestos más altos de la clasificación.
El resto de los favoritos cedieron entorno al minuto de tiempo con Sainz, a
excepción del finlandés Ari Vatanen, que vio como su Touareg quedaba
atrancado en un barranco y dejó escapar más de dos horas y media
en la meta, además de la práctica totalidad de sus opciones de
ganar su quinto Dakar. Con todo, el líder de la clasificación
general sigue siendo el portugués Carlos Sousa, también piloto
de Volkswagen, pero que no se beneficia del apoyo del equipo. Eso sí,
ya con sólo 45 segundos de ventaja sobre Sainz.
Por último, cabe destacar que no hubo ninguna especial para los camiones
que se dirigieron directamente a Málaga.
Isidre Esteve, que repitió tercer puesto en la clasificación
de motos de la segunda etapa del rally Dakar, aseguró que no arriesgó
demasiado porque el suelo estaba mojado y era difícil no caerse. "Estoy
contento porque hemos rodado bien en las dos primeras especiales, que eran completamente
diferentes, una con mucha arena y otra con terreno muy duro y mojado. Pero el
rally de verdad empieza ahora", aseguró.
Esteve aseguró que ha tenido buenas sensaciones en las primeras jornadas
del Dakar y destacó la importancia de divertirse en una prueba tan dura
como ésta. "Si no te diviertes, mejor te quedas en tu casa",
dijo.