Posee un motor 2.0 TFSI de 240 CV, con una potencia máxima entre 5.700 y 6.300 revoluciones y par máximo de 300 Nm. El consumo de 12.3 litros en ciudad y 7.0 litros en carretera, lo que da un consumo medio de 8.9 litros. Frenos delanteros 345 × 30 y traseros 286 × 12, y neumáticos 225 / 40 R18 92 Y.

El León Cupra no tiene reacciones que lo hagan difícil de conducir. Más bien al contrario, sorprende el ritmo al que se puede ir con poco esfuerzo.

El León es uno de esos coches que transmite perfectamente al conductor la situación de las ruedas en cada momento; que un coche deje sentir bien los apoyos me parece indispensable para poder conducir rápidamente con confianza.

Las llantas del Cupra son de 18 pulgadas. En la parte trasera de la carrocería tiene las letras «Cupra» debajo del mando de apertura del portón, y una salida de escape oval de grandes dimensiones, se han desarrollado unos nuevos sistemas de escape SEAT SOUND, con la característica principal de potenciar el sonido del motor y su sensación de potencia a bajas revoluciones. Los espejos retrovisores tienen la carcasa pintada en color negro.

El paragolpes delantero sólo se diferencia del de un León FR en que tiene algunos elementos pintados en negro, en lugar de ir pintados en el color de la carrocería.

En el interior más que de asientos deberíamos hablar de auténticos backets de competición que envuelven el cuerpo, con el reposacabezas integrado en el conjunto.

Los detalles que ofrece el León Cupra incluyen volante en piel, perforado con el fondo en rojo, el pomo del cambio, instrumentación en color blanco, los pedales metálicos deportivos. Todas las piezas con el logo Cupra.