El corto pero rapidísimo trazado de Val Vibrata situado en la Italia central,
fue testigo de una nueva y complicada actuación del equipo español
en un año de Masters que ha resultado muy difícil para los nuestros.
En esta última cita la expedición nacional contaba con 16 pilotos
repartidos en un total de 199 participantes (8 JR- 5 ICA- 2 FA- 1 ICC).
ICC.- En la categoría de más cilindrada volvía a estar
sólo José Antonio Pérez Cazalla ante la temida armada Italiana.
Una categoría en la que nombres como Toninelli, Manetti, Fore, Laudato,
Piccini y un largo etc, impresiona al más profesional. Pero una vez más
el catalán se lanzó a por el mejor de los resultados en su primera
temporada completa internacional. Pérez Cazalla se veía así
tras las clasificatorias en la 30º plaza (15º-23º) lo que le
obligaba a correr la repesca, que ganaba brillantemente y le valía para
estar en las dos finales. En ellas obtenía dos idénticas 22º
plazas, un buen resultado de Pérez que el año que viene podrá
mejorar en esta complicada categoría.
Fórmula A.- Los dos españoles en la categoría más
exigente y profesional de cuantas compiten, volvían a tener una destacada
actuación. Carentes de la presión de las clasificatorias al encontrarse
la inscripción por debajo de lo habitual, y ya que con menos de 34 pilotos
en pista estas mangas son puro trámite, todos los participantes se reservaron
para las dos finales a los puntos, que es donde se encontraba la verdadera disputa.
En ellas, la apretada clasificación del Campeonato contribuyo a un magnífico
espectáculo, en donde el danés Nicolaj Bolligtof se imponía
en el campeonato. Jeremy Iglesias y Peto Nieves obtenían al término
de las dos finales a los puntos una 7ª plaza cada uno, alternándose
esta posición en la carrera 1 y 2. Mientras en la restante Jeremy era
12º y Peto debía abandonar sin poder dar ni un solo giro.
Junior.- Esta vez fueron 5 los pilotos españoles que se colaron en las
finales, quedándose por el camino Oriol Dalmau, Genis Olive y Dani Juncadella.
Tras la clasificatoria europea de la pasada semana, era hora de ver si los españoles
mostraban idéntico potencial junto con el resto de pilotos mundiales.
Y a tenor de lo visto en Val Vibrata, podemos decir que sí. Miki Monrás,
que subía al podium en Portugal, no conseguía obtener las mismas
prestaciones en Italia, terminando la primera final sin dar un giro, mientras
en la segunda final se recuperaba espectacularmente y era undécimo.
En el lado opuesto teníamos a Javier Tarancon, que en Braga no conseguía
ni clasificarse para la final continental, y aquí conseguía dos
podiums con una victoria absoluta y una tercera plaza, siendo el mejor español
en el computo de resultados finales en este Masters 2006. Entretanto el resto
se hallaban en tierra de nadie: Marc Otero era 15º en la primera final,
mientras en la segunda volvía a ser sancionado al igual que en Braga.
Jordi Cunill, que partía segundo en la primera final, caía hasta
la 8ª plaza y era 32º en la segunda. Luis Miguel Villalba se retrasó
fatalmente sin pasar de sendas 27º plazas.
Intercontinental A.- Esta categoría destacó por la brillante cuarta
plaza de Abel Sequera en una de las clasificatorias y la clasificación
para las finales de David Alabart, que además era el español que
firmaba la actuación más regular del fin de semana. Alabart era
20º y 25º en ambas finales. Albert Costa, que sigue en horas bajas,
tuvo un abandono que posteriormente recuperó con la 17º plaza. Siso
Cunill era el mejor clasificado en la 14º plaza tras las clasificatorias,
pero en las finales se hundió por no terminar ninguna de las dos finales.
Sequera también era con dos abandonos el segundo piloto español
más perjudicado, aparte de Aleix Alcaraz que debutaba con nuevo material
de la mano de Genis Marco, que finalmente no conseguía clasificarse.