La 42º edición del Rallye Rías Baixas Redcom prometía
tensión, emoción y espectáculo y no defraudó, ya que
desde el primer tramo los aficionados pudieron deleitarse con una carrera de auténtico
lujo, donde todos los pilotos dieron el máximo para lograr alzarse con
el trofeo de ganador. Al final el premio se lo llevó Miguel Fuster (Renault
Clío) que tuvo que emplearse a fondo para hacer realidad su sueño,
ya que su compañero de equipo Manuel Rueda (Renault Clío), que al
final acabó segundo, no se lo puso nada fácil.
La lucha entre Fuster y el malagueño fue constante y estuvo presente
desde el primer tramo de As Neves que ganó Rueda. Pero esto no acabó
con los ánimos del alicantino, quien arriesgó más en los
siguientes tramos y se hizo con el liderato, pero no por mucho tiempo, ya que
en el último tramo de la mañana, en La Hermida, el piloto malagueño
se hizo de nuevo con la primera posición. No le duró mucho la
alegría a Manuel Rueda, ya que en Mondariz (primer tramo de la tarde),
Fuster se hizo con un liderato que ya no abandonaría hasta el final de
la prueba. El segundo puesto también dejó contento al joven piloto
malagueño, que además estaba satisfecho por haber realizado una
buena prueba.
La lucha por el tercer puesto, en la que estaban implicados Dani Solá
(Citröen C2), a la postre vencedor del duelo, y Sergio Vallejo (Renault
Clío), también fue muy intensa y no quedó decidida hasta
el último tramo. El piloto catalán, que venía a Vigo a
por el triunfo final, nunca estuvo cómodo en el Rallye Rías Baixas
Redcom, ya que los problemas le llegaron en el primer tramo, donde dejó
escapar mucho tiempo con respecto a sus perseguidores. A partir de ahí,
Solá siempre fue a remolque del resto y sólo en los dos últimos
tramos despertó de su letargo, agarrándose a un tercer puesto
por el que Sergio Vallejo estaba luchando con uñas y dietes. El “error”
del lucense estuvo, también, en el primer tramo, donde por culpa de una
serie de problemas mecánicos perdió un tiempo valioso que seguro
que le habría servido para subir al podio. Desde ese momento, Sergio
Vallejo y su hermano pelearon por recuperar posiciones y lo fueron logrando
tras ganar cuatro tramos (La Hermida, Mondariz y las dos pasadas por Ponteareas),
pero tanto arriesgar no tuvo sus frutos y al final los gallegos se tuvieron
que conformar con el cuarto puesto.
La mala noticia fueron los abandonos de dos favoritos al título, Alberto
Hevia y Joan Vinyes. El primero sufrió un accidente en el primer tramo
del día en As Neves por lo que tuvo que ser trasladado a Povisa, donde
se descubrió que tiene una pequeña fractura ósea en la
cara, que lo mantendrá en observación los próximos dos
días. Mientras, el piloto catalán tuvo que abandonar por problemas
mecánicos en su coche.
Hay que destacar que la quinta, sexta y séptima posición fue
para tres pilotos gallegos: Jorge González, “Rantur” (Mitsubishi
Evo IX), Luis Carballido (Citröen C2) y Alberto Meira (Mistubishi Evo VIII),
que demostraron estar a un gran nivel en toda la prueba.
La victoria final en el Grupo N fue para el ourensano Jorge González,
“Rantur”, que desde el primer tramo se hizo con el control del grupo
y no lo abandono hasta el final. El segundo puesto se lo llevó el también
gallego Alberto Meira, mientras que la tercera posición quedó
en manos del canario Santi Concepción (Mitsubishi Evo IX).
Mientras, el Desafío Peugeot se los adjudicó Josep Basols (Peugeot
206), muy seguido por Eloy Entrecanales y Roberto Flórez. En este grupo
las posiciones apenas variaron a lo largo del transcurso del Rallye Rías
Baixas Redcom.
Por su parte, la Copa Mitsubishi Evo se la llevó el ourensano Jorge
González, “Rantur”, que desde el primer tramo no cedió
su posición privilegiada, a pesar de los numerosos envites de sus perseguidores,
Santi Concepción y Antonio Garrido.
En el Trofeo de España Júnior la victoria fue para Francisco
Cima.
Esta edición del Rallye Rías Baixas contó con una gran
afluencia de público desde los primeros tramos, aunque fue por la tarde
cuando más aficionados se desplazaron hasta Mondariz y Ponteareas a presenciar
el espectáculo automovilístico. Nadie se quería perder
esta edición del rallye y todos querían disfrutar con una buena
prueba, algo que sin duda lograron y que se notaba en sus caras. Y es que a
pesar del infernal calor, el público no desfalleció ni se movió
de su sitio sólo para ver pasar los coches.
Los pilotos que más vítores recibieron fueron los gallegos, sobre
todos los hermanos Vallejo, al que supieron reconocer el enorme trabajo realizado
en este rallye.
También hay que destacar las gradas que, por primera vez, se colocaron
en el tramo de Ponteareas y que fueron un éxito. Muchos fueron las personas
que se desplazaron hasta allí y todos quedaron encantados con la ubicación
y lo bien que se podía ver todo.
Lo mejor del día no sólo fue la presencia de tantos aficionados,
sino también que siempre estuvieron bien colocados, obedeciendo las normas
de la organización.
Al término de la disputa del Rallye Rías Baixas el flamante ganador
de la prueba, Miguel Fuster, afirmaba que al final “hemos arriesgado lo
mínimo para lograr la victoria y todo salió bien”. Además,
el alicantino establecía que “estoy muy emocionado por el triunfo,
ya que fue un rallye muy duro y disputado desde el principio”. Si Fuster
tenía algo que destacar de la prueba del Campeonato de España
era “sus tramos finales, que se han disputado a un ritmo muy alto y que
son muy duros”.
Al término de la prueba tuvo lugar la ceremonia de clausura donde fueron
entregados los trofeos a los ganadores. En el acto estuvieron presentes el Director
Xeral para o Deporte, Santiago Domínguez y el presidente de la Federación
Española de Automovilismo, Carlos Gracia.