Ya se pueden hacer pedidos del Volvo XC90 modelo del 2007. Se distingue del anterior
porque tiene ligeros cambios de aspecto, exteriores e interiores, y nuevos elementos
de equipamiento. Hay un motor nuevo en la gama, de 3.2 l de cilindrada y 238 CV
que estrenó el S80 recientemente. El XC90 con este motor está a
la venta en niveles de equipamiento Kinetic, Momentum y Summun entre 49.000 €
y 56.150 €.
El manejo es cómodo y confiable, con un buen trabajo de las suspensiones
para filtrar las irregularidades del terreno sin perder el control de la carrocería.
Los frenos cumplen su papel, y para viajes largos se nos antoja como un compañero
ideal. Cómodo, rápido, seguro y versátil.
El objetivo buscado por los técnicos de Volvo para perfeccionar uno
de sus coches de más éxito ha sido conferirle un aspecto más
moderno y elegante, tanto en su exterior como en su interior. De esta manera,
la carrocería del XC90 luce ahora interesantes modificaciones, como nueva
calandra más cromada y unos parachoques diferentes. Las luces traseras
se han rediseñado y los reflectores del parachoques se ocultan en una
decoración cromada. Todas las versiones del XC90 disponen de molduras
decorativas laterales y manillas de puerta en el color de la carrocería.
Los retrovisores exteriores llevan ahora integrados los intermitentes; que disponen
de una nueva función, ya que al empujarse con rapidez su palanca de accionamiento,
parpadean tres veces.
También llevará el sistema de detección de obstáculos
en el ángulo muerto que Volvo llama «BLIS»; a diferencia
del que emplea Audi en el Q7 que funciona por radar, éste lleva dos cámaras
que están situadas en los retrovisores.
El sistema distingue bien si el coche está siendo rebasado o está
rebasando. Si el XC90 está adelantando a otro vehículo no se enciende
el testigo, salvo en el caso de que los dos vehículos igualen su velocidad
en el momento en el que están circulando en paralelo.
También dispone de una cámara de asistencia al aparcamiento.
Se trata de un ‘ojo’ que supervisa la parte trasera con la finalidad
de proteger a quien se encuentre tras el coche, de ayudar al conductor a aparcar
y de mostrarle la ruta que desea seguir marcha atrás. La cámara
cubre un amplio ángulo de visión detrás del vehículo,
y su imagen se proyecta en la pantalla RTI situada sobre el panel de instrumentos.
El ángulo de la imagen se ha diseñado para mostrar toda el área
sin sufrir excesivas distorsiones. La imagen también muestra las líneas
que limitan el área en la que el coche se deberá colocar al final
de la maniobra de marcha atrás. Dichas líneas se ajustan al movimiento
del volante para que el conductor siga la dirección de forma precisa.
El navegador ha sido mejorado. Ahora resulta más rápido, tiene
más información y es más sencillo de utilizar.
Todos los equipos de sonido tienen una entrada auxiliar para la conexión
de equipos externos; algunos de ellos pueden reproducir discos de música
en formato MP3 o WMA. Entre los equipos disponibles hay uno con amplificador
digital de «Alpine» con tecnología «Bang & Olufsen
PowerHouse ICEPower», sistema «Dolby Pro Logic II Surround»
y altavoces de «Dynaudio».