El GT Open de Francia ha sido el escenario de una primera carrera emocionante
y muy reñida, que ha terminado con que los tres equipos que ganaron en
Monza han vuelto a recibir los laureles. El Ferrari 430 de Playteam Sara Free
se llevó la victoria, con Alessandro Pier-Guidi y Michele Bartyan, por
delante del de RSV Motorsport con Peter Sundberg y Domingo Romero, que obtuvieron
su primer podio del año, y el Mosler MT900R de Escudería Bengala
con Lucas Guerrero – José Manuel Pérez Aicart.
El Ferrari 360 Challenge de Scuderia Giudici sigue imbatido en GTB tras conseguir
su tercera victoria, esta vez con Paolo Cutrera y el jefe del equipo Gianni
Giudici, mientras el Racing Box Viper de Piergiuseppe Perazzini y Marco Cioci
se llevó la primera victoria de la recién creada categoría
GTS.
En la salida, el “Pier-Guidi” pudo mantenerse en cabeza, pero no
consiguió despegarse del recién llegado RSV Motorsport Ferrari
430 de Peter Sundberg. Les seguía el Racing Box Viper de Belicchi, el
Escudería Bengala Mosler MT900R de Guerrero, el GPC Ferrari 360 de Montermini,
el Motor Competición Mosler de Villalba, el Edil Cris Racing Ferrari
360 de Cressoni y el Sun Red Seat Cupra de Vinyes (que pronto perdería
posiciones y luego tendría que parar en boxes con problemas mecánicos),
el BMS Scuderia Italia Aston Martin DBRS9 de Malucelli y el resto de la parrilla.
Mientras la diferencia entre los dos primeros no bajó en ningún
momento de los 2 segundos en la primera parte de la carrera, se libraban algunas
batallas interesantes en todas las posiciones por detrás de los líderes.
La parada obligatoria para cambiar de piloto y los hándicaps de tiempo
aportaron elementos de emoción, ya que los pilotos del RSV Ferrari tuvieron
problemas con los cinturones y el Escudería Bengala Mosler salió
con una puerta medio abierta. A pesar de todo, Romero salió en cabeza,
con menos de 10 segundos de ventaja sobre Bartyan. Después Basts Gutiérrez,
Pérez aicart, Zonca y Ruberti.
La segunda parte de la carrera estuvo marcada por varios accidentes, a medida
que los frenos y neumáticos empezaban a sufrir por la dureza de Magny-Cours.
El Escudería Roger Ferrari 430 Challenge fue el primero, al quedarse
parado en la pista (donde se quedó durante el resto de la prueba) seguido
por un espectacular trompo de Roda en el Autorlando Porsche 996.
En la vuelta 21, Bartyan se situó en cabeza y por detrás Ruberti
con el Edil Cris Ferrari y Pérez Aicart en el Bengala Mosler iban al
ataque y escalaban posiciones en detrimento de los primeros líderes como
el Racing Box Viper de Zonca (con muchos problemas de neumáticos), el
GPC Ferrari de Bastos y el Motor Competición Mosler de Gutiérrez
(que también hizo una visita a la arena en las últimas vueltas).
Después de la carrera, tres coches fueron penalizados con 25”
por exceso de velocidad en el pitlane: el Edil Cris Ferrari (que había
acabado la carrera en tercera posición), el GPC Ferrari y el Motor Competición
Mosler.
En GTS, la victoria no se le escapó al otro Racing Box Viper de Perazzini-Cioci,
que superó a los dos BMS Scuderia Italia Astons, mientras que en GTB
la carrera tuvo una historia más variada.
El F.González Camino/Escuela de Pilotos Ferrari 430 Challenge dominó
la mayor parte de la carrera, con Villacieros al volante, pero más tarde
sufrió algunos problemas (incluyendo un trompo), dejando el camino libre
para el 360 Challenge de Cutrera-Giudici, que ganó tras una carrera sin
incidentes, por delante del Porsche 996 de Médard-Pla y el Riverside
Lamborghini de Faraut-Mechaly.