Álvaro Bautista (Aprilia) se adjudicó la victoria en el Gran Premio
de Qatar de 125 c.c. que se disputó en el circuito de Losail y lo hizo
con gran autoridad e incrementando de esa forma su ventaja al frente de la clasificación
provisional del mundial, en la que es ahora más líder.
Primero en la parrilla, salió muy mal. En la primera curva era séptimo.
Pero desde esa crisis lanzó un ataque progresivo, a ritmo de récord,
que descolgó a Pasini, Kallio y Gadea hasta quedarse solo ante el asfalto.
Fue un paseo triunfal, el segundo consecutivo esta temporada, que acabó
con la racha de cuatro años, 56 carreras, sin que un piloto sumara dos
éxitos seguidos en la categoría.
Los inicios de la prueba del cuarto de litro resultaron un tanto accidentados,
ya que a la mala salida tanto de Jorge Lorenzo como de Héctor Barberá,
ambos se unió poco después el de Alex de Angelis, que le dejó
fuera de la competición.
El italiano Roberto Locatelli, que había sido el primer líder
de la carrera y autor del tercer mejor tiempo de entrenamientos, fue el siguiente
en cometer un error, pues se salió de la pista en su intento de superar
al italiano Andrea Dovizioso y, aunque pudo regresar, lo hizo en posiciones
muy retrasadas y obligado por ello a remontar en lo que quedaba de prueba.
Héctor Barberá, que se mantuvo buena parte de la carrera en la
tercera posición, al final sucumbió al ataque el veterano italiano
Roberto Locatelli, que se doblegó para su desesperación por apenas
treinta y cuatro milésimas de segundo, después incluso de tocarse
los carenados de ambas motos, en la última curva de la última
vuelta.
En MotoGP no hubo esta vez españoles en el cajón, pero la carrera
volvió a estar cargada de emoción, y aunque Valentino Rossi se
anotó su primera victoria del año, lo cierto es que no consiguió
hacerlo con facilidad.
Con Rossi y Hayden en los dos primeros peldaños del podio el tercero
quedó para Loris Capirossi, que no tuvo mayores problemas, mientras que
Casey Stoner aguantó el tipo como pudo frente a los veteranos de la cilindrada
y logró la quinta plaza, al no poder aguantar los envites del español
Sete Gibernau (Ducati Desmosedici) en las tres últimas vueltas.
Carlos Checa, quien salió decimotercero, se mantuvo en es puesto hasta
la séptima vuelta y una después ganó un puesto, el duodécimo
en el que entró en la línea de llegada, con José Luis Cardoso
(Ducati Desmosedici) cerrando la clasificación en decimosexto lugar.
Detrás de ellos y durante buena parte de la carrera estuvieron dos pilotos
latinos, el italiano Marco Melandri y el español Daniel Pedrosa que terminó
sexto.
"Hemos perdido como tres segundos y nos hemos quedado muy atrás
-lamentó Pedrosa- y luego nos hemos vuelto a encontrar con Hopkins pero
ahora ya se ha apartado y he ido para adelante, mi ritmo era bueno, pero entonces
me ha frenado Melandri, que frenaba muy tarde y aunque le he pasado por el rebufo
en la recta luego no podía mantenerlo y he perdido ocho vueltas estúpidas
y sin eso no sé si hubiera llegado adelante del todo pero seguramente
habría acabado entre los cuatro primeros, en todo caso hemos acabado
sexto y eso es lo que he podido hacer".