Las altas temperaturas, habituales en el sur de España por esta época del año, pusieron contra las cuerdas a las mecánicas, especialmente a los frenos y neumáticos. Esto perjudicó en varios compases de la carrera a Álvaro Pérez, quien cedía tiempo por este motivo.

Aunque llegaron a ocupar la segunda posición de la Beca Junior R2 y rozar el podio de la Peugeot Rally Cup Ibérica, el equipo que compite con la Escudería Santiago no pudo rematar la faena y caía hasta la cuarta posición de la Beka y séptima del trofeo ibérico organizado por Peugeot.

Casi sin descanso, el conjunto con sede en Noia trabajará a un ritmo frenético durante los próximos días, ya que en apenas quince días, volverán a viajar hasta el sur de España para competir en el Rallye de tierra de Pozoblanco, próxima cita del nacional de tierra y puntuable para la Beka.