Se trata de un menor de edad, de 12 años, quien murió tras ser atropellado por un camión de apoyo a los competidores, lo que elevó el número de víctimas en esta edición a tres personas y a 51 el total de muertos en 28 años de esta competencia.

El deceso del niño, cuya identidad no fue suministrada, ocurrió en una ruta reservada a los medios que transportan víveres y piezas de los vehículos que compiten, a la altura del kilómetro 200 del recorrido Tambacounda-Dakar, penúltima etapa de la trágica prueba.

La muerte, confirmada a los organizadores de la competencia por la gendarmería de Kaffrine, se suma a la de un niño de unos diez años de edad que fue atropellado por uno de los competidores y a la del motociclista australiano Andy Caldecott, fallecido hace cinco días tras protagonizar una violenta caída durante la novena etapa.

La muerte de un niño de 12 años, el segundo niño que se cobra el Rally Dakar y la tercera víctima en esta edición, no impedirá que se realice la ceremonia de premiación tal como estaba previsto.

Lo anunció el director de la competencia, Etienne Lavigne, quien afirmó que "las autoridades senegalesas quieren que la carrera se complete, que se dispute la última etapa en Senegal y que se realice la ceremonia de premiación".

Esta edición, casualmente, fue una de las más trágicas del Dakar, pues a la muerte en plena competencia del motociclista australiano Andy Caldecott, en la misma jornada en la que el español Esteve Pujol resultó gravemente herido, se sumaron luego las de dos niños, el viernes y hoy, que elevaron a 51 el total de víctimas en 28 años de historia.