Red Bull ha sido el equipo más madrugador entre los que presentan su monoplaza el día de inicio de los test. El equipo ha optado por mostrar el RB12 a través de fotos de estudio. Presenta grandes similitudes con su antecesor.

El Red Bull RB12 es fiel hijo de Adrian Newey, con un aspecto estilizado y mínimo en cada uno de sus detalles aerodinámicos. A pesar de las dificultades con Renault en los dos años del motor híbrido, el chasis de Milton Keynes siempre ha mantenido a sus coches en las posiciones de cabeza, con tres victorias en 2014 y varios podios en 2015.

"Con frecuencia me preguntan con qué parte del coche estoy más encantado pero con las reglas estables que tenemos en este momento, es difícil encontrar grandes áreas que explotar. Así que lo que hemos intentado es concentrarnos con este coche es conseguir un paquete cohesionado en todas sus partes, la suspensión, el chasis, la aerodinámica, todas trabajan juntas en armonía. Creo que hemos logrado mejorar con las lecciones del año pasado y las indicaciones de nuestras simulaciones nos dicen que el chasis de este año debería ser fuerte", añade Adrian Newey.

Aunque Renault continuará suministrando motores a Red Bull, en el diseño del nuevo RB12 no figura ninguna mención a la marca francesa ni tampoco a Infiniti, la filial japonesa que había nombrado los propulsores del equipo. El nuevo patrocinador de Red Bull TAG-Heuer ocupa ese lugar en la carrocería.

"Obviamente la decisión tardía del nuevo motor ha sido un reto, pero encontramos una solución a tiempo y todo el equipo ha trabajado muy duro para conseguirlo durante el invierno. Esperamos seguir adelante con el progreso que mostramos en la segunda parte de 2015 y continuar con esa racha en las primeras carreras de la temporada", ha señalado Christian Horner. "Mis esperanzas para esta temporada son que podamos hacer progresos de donde estábamos el año pasado. Por eso ponemos nuestras cabezas hacia abajo para hacer un buen desarrollo del coche y esperemos que con rendimiento viniendo de parte de la unidad de potencia podamos acercarnos a nuestros rivales inmediatos", señala.

"El nuevo color del coche es fantástico - comenzó Ricciardo - "La esperanza para nosotros es que se puede ser competitivo en la pista. Ha sido un largo tiempo desde la última carrera del 2015 y, por supuesto, hay un gran deseo de volver a la pista.

A las palabras del aussie le siguieron las del ruso quien dijo que: Después de la última carrera de 2015 yo estuve en Europa, principalmente para entrenamiento y el descanso. Yo necesitaba recargar las baterías. Ahora me siento listo para volver a la acción en la pista".

Los pilotos oficiales de esta temporada, el australiano Daniel Ricciardo y el ruso Daniil Kvyat, estuvieron presentes en la gala de presentación del nuevo diseño.