A la FIA no paran de lloverle las críticas por los cambios que ha introducido
en la reglamentación de la F-1 para el Mundial 2006. A las voces críticas
del tricampeón Alain Prost o de Michelin, se ha sumado la del heptacampeón
Michael Schumacher, que ha calificado de farsa los cambios.
En una entrevista a una revista alemana, Schumacher expresa su disconformidad
con las constantes modificaciones del reglamento y del formato de los grandes
premios, en la línea de lo que criticaba hace unas semanas Prost, quien
se quejaba de que "las reglas están siempre cambiando", lo
que evidenciaba "que el problema real de la F-1 es que está en un
estado permanente de conflicto".
“Por lo que se refiere a la evolución de los reglamentos no hay
estabilidad y es un vaivén permanente. Eso los convierten en una farsa”,
manifiesta el piloto de 36 años, a propósito del nuevo formato
de calificaciones en tres fases que se pondrá en marcha a partir del
próximo Mundial.
Bernie Ecclestone, el titular de la Fórmula 1, negó que los últimos
cambios reglamentarios hayan sido adoptados para favorecer a Ferrari. "La
Comisión F1 de la Federación de la que soy presidente los aprobó
después de tener 18 votos, que es el número mínimo que
se exige sobre sus 26 integrantes", apuntó.
También señaló que el alemán Michael Schumacher
no volverá a ser campeón porque consideró que su última
posibilidad la tuvo esta temporada y no lo consiguió.
"No creo que las nuevas reglas lo ayuden a ser de nuevo el favorito.
Ya se vio en el último campeonato, que aún con mayor potencia
en el motor y menos neumáticos para administrar, fue inferior tanto a
Fernando Alonso como a Kimi Raikkonen", afirmó el presidente de
la Formule One Management.
El piloto de Ferrari, tercero en el Mundial del 2005 con una victoria, reiteró
que no piensa poner fin a su carrera. “La gente debería entender
que lo que de verdad me motiva es pilotar un Fórmula 1 y no ser siempre
el primero o aplastar a mis rivales”, explicó. Añadió
que espera ser de nuevo campeón del mundo dentro de un año aunque
no habló de su futuro en Ferrari, su contrato con la escudería
italiana expira a finales del 2006.