El chasis del M6 es semejante al de un M5 salvo por la distancia entre ejes (más corta) y por su centro de gravedad más bajo. Cuesta 115.300 €, es decir, 20.300 € más que un M5. Es más un cupé de altísimas prestaciones que un deportivo en lo que todo está supeditado a la máxima eficacia.
Combina como pocos la comodidad y espacio para cuatro pasajeros con el alma de un auténtico “pura sangre” capaz de hacer enrojecer a muchos Porsche, Ferrari, Aston Martin, etc.
Gracias a sus 507 caballos de potencia máxima, el M6 sería capaz de alcanzar hasta 320 kilómetros por hora . Sin embargo, BMW ha decidido controlar la 'manada' y establecer además un tope máximo de velocidad en 250 km/h, que se pueden alcanzar en sexta y séptima.
El control de la potencia se logra mediante un comando denominado Power Button , que permite adaptar la fuerza del motor a los deseos del piloto. Así, con el botón en posición de 'desactivado', el M6 ofrece una potencia máxima de 'sólo' 400 caballos, mientras los otros 107 reposan a la espera de pulsar el power .
Con todo su potencial activado, este V10, capaz de revolucionarse hasta las 8.250 vueltas por minuto, puede colocar el velocímetro del M6 en los 100 km/h en tan sólo 4,6 segundos y partiendo de 0. El combustible quemado por cada 100 kilómetros se sitúa como término medio en los 14,8 litros, según BMW.
Otra de las características destacadas del nuevo modelo es su ligereza; el M6 pesa 1.785 kilos, frente a los 1.830 que marca en la balanza la berlina M5, y logrando una cifra raramente superada por otros vehículos de potencia similar. Esto se ha logrado gracias a elementos más ligeros como su techo de fibra de carbono o las llantas de aluminio forjadas.
El M6 gana velocidad con una facilidad asombrosa. En cierta medida no lo parece porque el interior está bien aislado; se puede llegar a una velocidad muy alta sin ser consciente de ello. De todas maneras, no empuja en marchas cortas con la fuerza y violencia con la que lo hacen algunos coches de planteamiento más deportivo, que tienen menos potencia pero son más ligeros.
Al activar el «MDrive», se activan automáticamente los ajustes de máxima potencia, la máxima dureza de la suspensión y la máxima rapidez posible del cambio de marchas. El control de estabilidad entra en un programa más «permisivo» (que es nuevo en BMW, se denomina «MDynamic») y que sólo se consigue pulsando la tecla del volante.