Documento sin título
PSA, que prevé recuperarse en 2010, triplicó sus pérdidas.
El presidente del grupo francés PSA Peugeot-Citroën, Philippe Varin,
se mostró ayer confiado en restablecer su rentabilidad -tras anunciar
unas pérdidas históricas de 1.161 millones de euros en 2009- en
el primer semestre de este año. Sin embargo, no ocultó su incertidumbre
respecto a la segunda mitad.
Varin no se quiso aventurar sobre lo que podría ocurrir de julio a diciembre
porque dijo desconocer el efecto que tendrá el fin de las primas al desguace
en la buena parte de los países europeos. En todo caso, señaló
que espera que Peugeot y Citroën juntas incrementen su cuota de mercado
mundial.
Dentro de su estrategia de internacionalización, su prioridad es Asia
y más en concreto China, donde avanzó que, en un mercado que seguirá
creciendo a un ritmo superior al 20%, su grupo venderá este año
más de 350.000 vehículos, tras los cerca de 270.000 de 2009. Sólo
en enero ya han matriculado 39.000 vehículos.
En cuanto a las negociaciones con Mitsubishi de cara a constiuir una alianza,
señaló la complementariedad entre los dos grupos para desarrollar
vehículos eléctricos (en los que está más especializado
el grupo japonés) e híbridos. Acerca de la colaboración
con Toyota en la República Checa, la defendió como interesante
para PSA pese al problema con los aceleradores en algunos modelos.
Por su parte, el director financiero, Frédéric Saint-Geours,
además de informar de las ya mencionadas pérdidas, 3,2 veces superiores
a las registradas en 2008, señaló que el pasado año 6.800
personas dejaron la empresa en Europa dentro del programa de ajuste de la plantilla,
más de lo que la dirección había calculado con su plan
de salidas voluntarias. La plantilla en Europa ha quedado en 106.800 empleados.
Noticia extraída
de: ElMundo.es