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El australiano ha protagonizado actuaciones de gran campeón
en 2009 pero sus posibilidades de luchar por el título se malograron tras
retirarse de la competición durante tres Grandes Premios a causa de los
problemas físicos.
Casey Stoner tuvo un fulgurante arranque de temporada. En la siempre especial
carrera nocturna de Qatar, el australiano del Ducati Marlboro consumó
el dominio apuntado durante ese fin de semana cosechando una incontestable victoria,
la tercera consecutiva en este escenario, para situarse como primer líder
del Campeonato 2009.
Una serie de sólidos resultados en Japón, España y Francia
precedieron a su segundo triunfo del año, en Italia. Fue una victoria
de amplias resonancias simbólicas ya que brindaba el primer éxito
de Ducati en Mugello y acababa con el prolongado dominio de Valentino Rossi
en su casa.
Pero las siguientes citas del Campeonato, en Catalunya y Holanda destaparon
los problemas físicos de Stoner, que terminó extenuado en ambas
carreras pese a conseguir subir al tercer cajón del podio.
Tras la desafortunada carrera en Gran Bretaña, donde una errónea
elección de neumáticos le acabó condenó a la 14ª
posición, el piloto de 23 años optó por retirarse durante
tres Grandes Premios para recuperarse plenamente. La controvertida decisión
significaba decir prácticamente adiós a sus posibilidades de luchar
por el título de 2009.
En su retorno a la competición, el australiano exhibió un excepcional
rendimiento. En Portugal, su primer Gran Premio tras dos meses de inactividad,
ya consiguió el 2º puesto y dos semanas más tarde confirmó
que sus problemas físicos habían quedado atrás con una
gran victoria en casa, en el trazado australiano de Phillip Island, donde recuperó
la tercera plaza de la clasificación general que había ocupado
su rival Dani Pedrosa. Una semana después se mostró de nuevo imparable,
subrayando su gran momento de forma con otro triunfo en Malasia, el cuarto de
la temporada.
Con estos antecedentes, el piloto de Southport abordó la carrera en
el circuito de Cheste con muchas cartas a su favor para culminar el año
con un último éxito, especialmente tras liderar todas las sesiones
de entrenamiento del fin de semana. Sin embargo acabaría el Campeonato
en falso, por culpa de una caída en la vuelta de calentamiento previa
a la carrera.
El incidente le impidió defender una tercera plaza del Campeonato que
tenía prácticamente asegurada y que terminó arrebatándole
Pedrosa, ganador en esa última prueba. Stoner quedó como el cuarto
de los `cuatro magníficos´ pero dejó la sensación
de que en 2010 irá a por todas para dinamitar ese estatus.