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Fernando Alonso saldrá decimoséptimo en el Gran Premio de Japón,
antepenúltima prueba del Mundial de Fórmula 1, después de
ser sancionado con cinco puestos al igual que Jenson Button, Rubens Barrichello,
Adrian Sutil y Sebastian Buemi en una de las sesiones de calificación más
accidentadas que se recuerdan y en la que Sebastian Vettel logró la 'pole
position'.
La FIA no dejó títere con cabeza después de analizar las
telemetrías y hacer declarar a los pilotos implicados. Así, decidió
sancionar a Buemi por no detenerse después del accidente a pesar de haber
dañado seriamente su vehículo. Por su parte, sancionó a
Alonso, Barrichello, Button y Sutil por no haber disminuido suficientemente
la marcha cuando había bandera amarilla.
Lo curioso es que Alonso fue el único que deceleró al ver lo
ocurrido y se metió en boxes siguiendo las normas establecidas, mientras
que los otros tres hicieron vuelta rápida personal para meterse en la
Q3. Al final, el asturiano recibió injustamente la misma sanción
que los demás cuando el resto 'pasó' de banderas y fueron a hacer
un buen tiempo que no les ha sido descontado.
Los comisarios argumentaron que Fernando logró su mejor tiempo en el
segundo sector con bandera amarilla y que solo disminuyó su marcha una
vez pasado el mismo. Alonso, en su declaración a los comisarios, dijo
que con la polvareda que había levantado Buemi al salirse de la pista
y golpear contra las barreras de seguridad, cuando había visto la bandera
amarilla era ya tarde, pero igualmente había frenado.
Glock, directo al hospital
Por si fuera poco, también Kovalainen y Liuzzi fueron sancionados cinco
puestos por sustituir la caja de cambios, mientras que Glock y Webber tendrán
que salir desde la calle de garajes al tener que sustituir el chasis de sus
coches tras sufrir sendos accidentes. En este caos de sanciones, uno de los
grandes beneficiados fue Jaime Alguersuari, que sufrió un accidente sin
consecuencias en la Q2, y se clasificó decimoquinto, pero que gana cinco
puestos por las diversas sanciones.
La sesión de calificación tuvo que ser interrumpida hasta en
tres ocasiones por diversos accidentes que marcaron la jornada en el circuito
de Suzuka. El primero fue el de Jaime Alguersuari en la curva Degner nada más
comenzar la Q2, ronda a la que accedía por primera vez y en la que solamente
pudo dar una vuelta. Por suerte, el piloto español salió por su
propio pie, algo que no pudo hacer Timo Glock. El alemán impactó
en otra curva, la de entrada a meta, con menos escapatoria, por lo que su golpe
fue más violento. El de Toyota fue retirado en camilla y trasladado en
helicóperto a un hospital, pero enseguida hizo un gesto de encontrarse
fuera de peligro.
El siguiente en la senda de los accidentes fue Sebastian Buemi, que lo hizo
poco antes de acabar la Q2 dejando su alerón delantero en medio de la
pista, lo que perjudicó a varios pilotos entre los que se encontraba
Alonso. El asturiano levantó el pie al ver las banderas amarillas tal
y como debe hacerse, pero Button, Barrichello y Sutil no lo hicieron y consiguieron
mejorar sus tiempos. Eso dejó fuera de la Q3 a Fernando.
Maldita curva Degner
Ya en la Q3 fue Kovalainen el que perdió el control en la misma curva
que Alguersuari, aunque fue el impacto fue menos aparatoso. Una curva que la
tomó en primer lugar con Buemi, ya que el suizo también perdió
el control en la Q1 sin ningún tipo de incidente. Buemi dijo después
que "el piano está un poco levantado y si lo tocas pierdes la adherencia
con el suelo y, por lo tanto, el control del coche". Y es que hasta Mark
Webber se vio afectado en dicha curva, pues se estrelló en la tercera
sesión de los libres y no pudo participar en la calificación.
La sesión se reanudó por tercera vez para que Vettel marcara
el mejor tiempo por delante de Jarno Trulli, el mejor en la tercera sesión
de los libres, y de Lewis Hamilton. El alemán de Red Bull tiene una buenísima
oportunidad para agarrar con más fuerza sus escasas opciones al Mundial,
ya que los dos Brawn salen bastante por detrás.
Noticia extraída
de: Marca.com