En la sala de prensa del circuito de Le Mans el bicampeón del mundo dijo que "cuando De Puniet me ha pasado pensaba que era la última vuelta porque no había mirado la pizarra. He rezado para que no fuera así y él ha cometido un error en la última vuelta".

El actual campeón de la cilindrada calificó la carrera de "fantástica y muy emocionante al final", y apuntó que el estado de los neumáticos en las últimas vueltas había sido "la clave", algo que el catalán reconoció saber "desde el principio".

Porto desertó por rotura de motor al promediar la competencia, cuando marchaba en el cuarto lugar y se mostraba como uno de las más veloces.