El italiano Valentino Rossi dio este domingo una nueva exhibición en la categoría reina del mundial de motociclismo, al imponerse en el primer Gran Premio de China pese a la lluvia torrencial que inundó el circuito de Shanghai.

El actual campeón logró una victoria histórica, la primera en el trazado chino, a pesar de que su Yamaha no era a priori la moto que mejor se adaptaba a las condiciones de mojado y pese a partir, además, desde la sexta posición en la parrilla de salida.

El gran derrotado en MotoGP fue de nuevo el español Sete Gibernau, en principio el mayor rival del italiano, que terminó en cuarta posición pese a ser un especialista con lluvia.

Rossi consiguió colocarse líder en la quinta vuelta, la misma en la que Carlos Checa se fue por los suelos y, a partir de ahí, abrió un hueco que resultó insalvable para sus rivales, incluido el francés Olivier Jacque, quien como piloto sustituto del alemán Alex Hofmann, lesionado, protagonizó una espectacular carrera y logró el primer podio de la temporada para Kawasaki. Jacque dio una auténtica exhibición de pilotaje bajo la lluvia y durante algunas vueltas incluso puso en jaque al campeón mundial, al que le recortó de forma importante las diferencias, pero al final se tuvo que conformar con la segunda plaza, por delante del italiano Marco Melandri y de Gibernau.