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El tetracampeón del mundo de MotoGP Valentino Rossi acabó el domingo
con la racha ganadora del australiano Casey Stoner y se impuso en el Gran Premio
de Estados Unidos, reforzando su liderato en la clasificación general.
Chris Vermeulen siempre se mueve como pez en el agua en el circuito de Laguna
Seca, que ya conocía de sus tiempos en Superbikes. Acabó tercero.
El piloto italiano Valentino Rossi (Yamaha) se mostró muy satisfecho
con el primer triunfo de su carrera en Laguna Seca, que le permite aumentar
su ventaja al frente del Mundial de MotoGP. "Ha sido la mejor carrera del
año porque esta victoria llega en un punto importante del año,
justo antes del parón. He vivido una bella batalla con Stoner, muy divertida",
afirmó en declaraciones a Televisión Española.
Ya había avisado 'Il Dottore' ayer. Para ganar a Stoner debía
hacer una buena salida e impedir que el 'aussie' estuviera cómodo y el
italiano cumplió su guión a la perfección. En cabeza desde
el inicio, el transalpino tuvo que emplearse a fondo para sacar petróleo
de su YZR-M1.
Jorge Lorenzo sufrió una caída en la que se fracturó el
tercer metatarsiano del pie izquierdo, aunque podrá correr la próxima
carrera, que se disputará el próximo 17 de agosto en el circuito
checo de Brno. Con Jorge fuera de carrera y Pedrosa ausente, el honor español
quedó en manos de Toni Elías, que realizó su mejor carrera
de la temporada y concluyó séptimo.
Después de la caída de Lorenzo, Rossi y Stoner se colocaron al
frente de la carrera y se descolgaron de los demás. Los dos pilotos fueron
alternando el liderazgo durante más de la mitad de la carrera.
El momento clave llegó a nueve vueltas del final. Stoner volvió
a pegarse a Rossi en la corta recta, pero esta vez apuró demasiado la
frenada y acabó fuera de la pista. Sufrió entonces una caída
sin importancia pero que le dejó a 16 segundos del Doctor. La suerte
estaba echada. La celebración de Rossi, que nunca había ganado
en Laguna Seca, fue apoteósica.
Stoner reconoció haber cometido un error al caerse después de
una serie de emocionantes maniobras de adelantamiento con Rossi.
"Cometí un pequeño error, fue culpa mía", dijo
Stoner. "Estoy un poco decepcionado, pero sigo contento con el resultado.
Ha sido una de las carreras más agresivas en las que he estado nunca",
admitió.