Con un diseño elegante y esbelto, el Q5 mide 4,63 metros de longitud, 1,88 metros de anchura y tan sólo 1,65 metros de altura. El frontal, dominado por una gran parrilla Singleframe, puede equiparse opcionalmente con faros de luces de xenón plus, así como con la luz de marcha diurna en tecnología LED.

Sin perder su diseño de SUV, con estas medidas intenta ser más deportivo y estilizado que sus rivales, lo que no quita que un tamaño así siga siendo considerable para ser una alternativa cómoda en ciudad a una berlina.

Los tres propulsores iniciales serán dos diésel: 2.0 TDI 170 cv y 3.0 TDI 240 cv y uno gasolina: 2.0 TFSI 211 cv. Durante el próximo año 2009, la gama de motores se ampliará con la llegada del 3.2 FSI de 270 CV 6 cilindros, además de un posible 2.0 TDI de 140 CV y un 2.0 TFSI con una potencia que rondará los 180 CV. El 2.0 TDI lleva un cambio manual de seis velocidades, mientras que los dos motores más potentes equipan la caja de doble emgrague S tronic de 7 velocidades.

El propulsor de gasolina de 2.0 litros de este modelo desarrolla una potencia de 211 caballos y tiene un consumo de combustible de 8,5 litros por cada cien kilómetros recorridos, mientras que el motor TDI de 170 caballos consume 6,7 litros a los cien y el TDI de 3.0 litros y 240 caballos tiene un consumo de 7,5 litros.

En su parte trasera nos encontramos un portón muy ancho que se extiende hasta los laterales para facilitar la carga en su maletero, de 540 litros.

El diseño de la carrocería mantiene los rasgos de otros modelos de Audi. En los faros hay una tira de diodos luminosos para la función de luz de día; también hay diodos para varias funciones de los pilotos. El portón es de aluminio. Algunos elementos de la carrocería pueden ir pintados en negro, pintados en el mismo color que la carrocería o en un color que haga contraste.

Respecto a las capacidades offroad del Audi Q5, tiene una capacidad de subir colinas de hasta 30 grados, un ángulo de ataque de 25 grados y un ángulo en pendiente de 17,5 grados. La distancia al suelo es de 20 centímetros, que puede elevarse hasta 50 cm.

El equipamiento de serie incluye el control de estabilidad, un freno de estacionamiento electromecánico, el climatizador automático o un display en el cuadro de instrumentos en el que se muestra, por ejemplo, la marcha ideal recomendada para conducir del modo más eficiente, elementos como el sistema de entrada y arranque sin llave (advanced key), iluminación activa en curva (adaptive light), alerta de cambio involuntario de carril (Audi Lane Assist), programador de velocidad activo (Adaptive Cruise Control), entre otros.