La nueva era de la marca , comenzó en 2001 con el lanzamiento del Murciélago, 
seguido en 2003 por el Gallardo y continúa ahora con la llegada del Murciélago 
Roadster.
Resulta mecánicamente muy similar al Murciélago cupé, 
  modelo del que deriva. El motor es el mismo V12, con una cilindrada de 6.192 
  cm³, una potencia máxima de 580 CV a 7.500 rpm y un par máximo 
  de 650 Nm a 5.400 rpm. Las prestaciones anunciadas por el modelo italiano son 
  espectaculares, con una velocidad máxima de 320 km/h y una aceleración 
  de 0 a 100 km/h en sólo 3.8 segundos. De serie se ofrece con una caja 
  manual de seis velocidades. Opcionalmente puede instalarse una automática 
  también de seis relaciones, denominada e-gear por Lamborghini.
Además de la eliminación del techo, la carrocería ha sufrido 
  otras modificaciones. El capó que cubre el motor se abre en sentido contrario 
  a como se abre el del cupé. Ahora cierra por detrás del habitáculo 
  y bascula sobre la parte trasera del coche, como lo hacía en el Lamborghini 
  Miura. Detrás de los asientos se encuentra alojada una barra que se libera 
  en caso de peligro de vuelco para proteger a los ocupantes. Se ofrece en opción 
  un techo blando para uso ocasional, con el que Lamborghini no aconseja superar 
  160 km/h.
Lamborghini insiste mucho en que se ha logrado una rigidez y una efectividad 
  análogas a las del cupé. Declara haber probado ambos vehículos 
  en diversos circuitos y haber obtenido tiempos de vuelta «más o 
  menos idénticos».
Sólo unos pocos afortunados en todo el mundo podrán acceder a 
  la nueva creación de Lamborghini, el Murciélago Roadster, pues 
  su precio podría rondar los 260.000 euros.