Sainz, que partió con 18 segundos de ventaja sobre su inmediato rival, Stéphane Peterhansel, ha ampliado la distancia y ha acabado primero de la general con 2 minutos y 1 segundo de margen sobre el perseguidor francés. Finalmente un error de navegación a los nueve kilómetros, arruinó las oportunidades del piloto de Mitsubishi, y abrió las puertas al triunfo de Sainz.

Nani Roma, una vez solucionados los problemas con la dirección de su Mitsubishi que le alejaron de los primeros puestos en la etapa del viernes, volvió a estar con los mejores y acabó sexto el día, a 3 minutos y 49 segundos de Sainz.

“Estamos verdaderamente felices por ganar, sobre todo después de lo que nos pasó en la segunda etapa, con ocho minutos perdidos por una sucesión de problemas”, indicó el piloto madrileño. Sainz no quiso restar méritos al trabajo de sus compañeros en el rally y aseguró que "este éxito es un éxito de todo el equipo". "Quiero darle las gracias a todos en Volkswagen Motorsport, a mis mecánicos y, sobre todo, a mi copiloto, Michel Périn. Todos juntos lo hemos logrado", agregó el actual campeón de la Copa del Mundo de raids.

El alemán Dieter Depping (Volkswagen) consiguió la última plaza del podio, en una prueba dominada de principio a fin por la escudería alemana, que ganó las siete etapas.

El éxito de este nuevo tipo de prueba, que podría volverse a celebrar en septiembre, en Portugal, es un punto a favor de la marca alemana, que se había interrogado sobre su futuro en el mundo del todoterreno desde la anulación del Dakar.

En motocicletas, Casteau se impuso en la general al chileno Francisco López (KTM) y al también francés Alain Duclos (KTM), aunque la última etapa la ganó el eslovaco Jarolav Katrinak, de la misma marca. El mejor español del rally fue José Pellicer (Yamaha), cuarto en la general, a 21:20 del liderato, y sexto en la última etapa. Jordi Viladoms (KTM), que terminó cuarto en la etapa, finalizó sin embargo sexto en la clasificación final, a 27:57 del primer puesto.