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Fernando Alonso llevaba semanas acumulando ira, midiendo los tiempos, resoplando
mientras miraba con esperanzas a la clasificación. Tras rodar por delante
de Hamilton el viernes y en las dos primeras tandas de la toma de tiempos oficial,
en la vuelta definitiva quedó a seis décimas de su compañero.
Le sorprendió la distancia y estalló contra su equipo.
El doble campeón mundial arremetió violentamente contra McLaren-Mercedes,
de la que esperaba "bastante más", así como contra su
patrón Ron Dennis, responsable de los problemas vividos esta temporada
por la escudería.
Lo ha dicho en una entrevista concedida tras los entrenamientos oficiales disputados
en el espectacular circuito de Shangai. Alonso se mostró completamente
hundido, y sólo deposita sus reducidas esperanzas en una hipotética
lluvia que igualaría las cosas entre él y los tres que le superan
en la parrilla de salida.
"Siete décimas, no recuerdo ninguna carrera que haya estado por
detrás de nadie", declaró a los medios. "Ha sido un
poco raro, era todo el fin de semana un poco más rápido, en la
crono uno y la crono dos he estado ahí, tercero, y luego la crono tres
estar tan lejos... Yo he sido el primer sorprendido, esperaba mucho más".
Alonso también se quejó del trato recibido por McLaren durante
la temporada y de no haber visto correspondida su aportación al equipo.
"Desde fuera del equipo tenía otra imagen: era un equipo serio,
muy profesional, y decido meterme aquí después de ganar dos campeonatos
del mundo. Después de haber mejorado el coche todo lo que he podido,
el año pasado estaba luchando en el grupo de los (que luchaban por el
puesto) tres y este año van a ganar el campeonato del mundo, y la verdad
es que el trato no ha sido del todo bueno".
Ante la pregunta de un periodista de si criticaba que su trato no hubiese sido
el de un campeón, Alonso respondió: "No el de un campeón,
sino el de una persona normal".
Insinúa públicamente, por primera vez, que McLaren ha apoyado
a Lewis Hamilton: "He competido contra un compañero y rival que
tiene un cariño casi paternal por parte del jefe de la escudería.
Sabemos cómo se alegran de las victorias de uno o de otro y no puedes
confiar mucho".
Su ataque a Ron Dennis fue frontal. Deslizó que es un mentiroso, tras
escuchar que el patrón había declarado que estaba "molesto"
con sus silencios. "A veces, vale más callar que mentir. Es lo que
debía haber hecho esta temporada, porque muchos de los problemas que
ha tenido McLaren este año han sido por su culpa. He hablado del tema
con ex pilotos del equipo, como Coulthard, Montoya, Raikkonen... Se han ido
y han encontrado la felicidad".
Ante la pegunta de con que ánimo afronta la carrera él ha contestado
que: “Con ninguno. Ánimo muy poquito. Estás cuarto, tienes
que recuperar una barbaridad de puntos y confías en la última
esperanza que tienes, que es que en teoría va a llover y que sea una
carrera muy difícil, que los demás tengan problemas y tú
tengas la suerte de acabarla. Eso es lo único que te hace salir a la
carrera con un poco de ilusión. Lo demás sabes que va a ser imposible,
una carrera en seco va a ser imposible, y luego quedando todavía Brasil
sabes que alguna cosa va a salir mal o torcida, que es como lleva saliendo ya
todo el año.”
Y para terminar de descubrir todas las intrigas que se han desatado contra
Alonso a lo largo de esta desesperante y accidentada temporada han salido a
la luz las recientes declaraciones del mandamás de la F1 Bernie Ecclestone
que tras la disputa del Gran Premio de Japón regresó a Gran Bretaña
y comentó al periódico The Guardian que Lewis Hamilton es un soplo
de aire fresco para la Fórmula 1 y que: “Es obvio que la persona
indicada para ganar el campeonato del mundo es Lewis. De hecho, mi miedo principal
es que no lo gane él. Kimi Raikkonen apenas habla con nadie y ha hecho
poco por este deporte, y en cuanto a Fernando Alonso, en sus dos años
como campeón del mundo no ha hecho nada”.